Este miércoles, la dirigencia del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares (SUNTRACS) informó, durante una conferencia de prensa, que su secretario general, Saúl Méndez, solicitó asilo político en la Embajada de Bolivia en Panamá, alegando que su vida corre peligro.
Los dirigentes denunciaron que se ha puesto en marcha una persecución política con el objetivo de judicializar a los obreros que han mantenido protestas durante las últimas semanas.
"En este momento, a él (Saúl Méndez) se le ha concedido una protección personal, hasta que, finalmente, en Bolivia, se estudie y se ve detallada la condición de asilo político", señalaron.
La semana pasada, Jaime Caballero, dirigente del SUNTRACS, se le dictó la detención provisional por el presunto delito de blanqueo de capitales y otros delitos financieros.
El martes 20 de mayo, personal del Ministerio Público, acompañado por unidades policiales, realizó un allanamiento en las oficinas del sindicato, ubicadas en David, provincia de Chiriquí. Según información extraoficial, la fiscalía se trasladó desde la capital para llevar a cabo las diligencias.
También ayer, el Instituto Panameño Autónomo Cooperativo (IPACOOP) decidió cancelar la personería jurídica de la Cooperativa de Servicios Múltiples Suntracs, R.L., luego de que una auditoría realizada desde 2022 detectara 14 hallazgos en el área financiera y otros 10 en los controles o medidas de prevención de blanqueo de capitales, los cuales no fueron atendidos por su istración.