José Abel Almengor, exfiscal del Ministerio Público, compartió su perspectiva sobre la solidez de los procesos judiciales del país y el caso de blanqueo de capitales del sindicato Suntracs, subrayando la importancia de los mecanismos legales y democráticos frente a la inestabilidad y las acusaciones sin fundamento.
En el caso de un juicio oral, Almengor mencionó que el estándar requerido es mayor, demandando testimonios directos, interrogatorios, contrainterrogatorios y peritajes financieros, resaltando la exigencia de ser específico, concreto y claro.
Y tras la imputación, el exfiscal explicó que la audiencia de medidas cautelares sigue, centrada en los riesgos procesales y que existen tantas "teorías del caso" como partes en el proceso, siendo la del Ministerio Público una y la de la defensa otra.
Blanqueo de capitales 4l6s4c
El exfiscal explicó que es una conducta con larga data en la legislación panameña con antecedentes desde el código de 1922, donde se hablaba de encubrimiento de los productos del crimen, indicando que el blanqueo busca perseguir actos realizados de manera consciente, con la intención de ocultar los productos del crimen.
Almengor subrayó la necesidad de probar siempre el delito precedente o previo en un caso de blanqueo de capital, porque una persona no puede ser perseguida sin acreditar que estaba introduciendo dinero de ilícita procedencia a sabiendas o previendo su origen ilegal.
Papel de la Unidad de Análisis Financiero (UAF) f621s
En definitiva, Almengor explicó que, tras recibir un reporte de operación sospechosa (ROS) de un banco, la UAF realiza un análisis técnico y jurídico para determinar si el reporte es viable para una causa penal, aclarando que es una actividad que puede ser vista como inusual pero no ilegal, mencionando como ejemplo la tipología de realizar depósitos consecutivos por debajo del umbral de reporte para evitar la notificación al banco.