El presidente de Austria, Alexander Van der Bellen, anunció el domingo que se presentará a la reelección a finales de este año, tras un mandato caracterizado por múltiples turbulencias políticas.
“Me gustaría seguir poniendo mi experiencia al servicio de nuestro país”, dijo, prometiendo concentrarse plenamente en sus funciones hasta una campaña “corta, justa, transparente y sobre todo frugal” este otoño.
No está claro a quién se enfrentará en las elecciones, cuya fecha aún no se ha fijado. El presidente austriaco tiene un mandato de seis años.
Van der Bellen venció al candidato del Partido de la Libertad de extrema derecha, Norbert Hofer, en una votación celebrada en diciembre de 2016. Se trataba de una repetición ordenada por el Tribunal Constitucional de Austria después de que el partido de Hofer denunciara irregularidades generalizadas en la votación de la segunda vuelta, que ganó Van der Bellen por un estrecho margen.
El presidente austriaco es, en principio, una figura en gran medida ceremonial, pero desempeña un papel destacado en tiempos de crisis política interna. Eso ha dado a Van der Bellen una gran visibilidad.
Después de que la coalición del canciller conservador Sebastian Kurz con el Partido de la Libertad se derrumbara en un escándalo en 2019, el presidente nombró un gabinete interino de expertos no partidistas bajo la dirección de Brigitte Bierlein, entonces directora del Tribunal Constitucional.
Prominentes políticos volvieron a entrar y salir del palacio el pasado otoño tras la dimisión de Kurz, que había vuelto en un nuevo gobierno con los Verdes. El país tuvo tres cancilleres en dos meses, y el sucesor de Kurz, Alexander Schallenberg, dio paso en pocas semanas al actual canciller Karl Nehammer.
FUENTE: Associated Press