Tras ser anunciado por parte del gobierno que se destinarán 10 millones de dólares por estado de emergencia en la provincia de Bocas del Toro, el exministro de Trabajo, Luis Ernesto Carles, calificó como "lamentable" este conflicto que lleva más de un mes de extensión.
Consecuencias de la situación
Carles cuestionó por qué, si el reclamo principal sobre la Ley 45 fue atendido por el Ejecutivo, la huelga no se levanta, advirtiendo están en juego más de 30 mil empleos directos e indirectos en la provincia, una paralización que afecta a diversos negocios locales como restaurantes, servicios de carga, logística, transporte y comercio, incluyendo pequeños empresarios con pocos trabajadores.
El exministro expuso que la situación ya tuvo repercusiones directas en el sector bananero, donde uno de los principales inversores, que también opera en otros países centroamericanos, anunció que ya no embarcará la mitad de la fruta de Costa Rica que salía por el puerto de Almirante.
Estado de emergencia
Carles, quien visitó la provincia durante su gestión, analizó la complejidad del escenario, destacando la urgente necesidad de cubrir requerimientos básicos en salud y alimentación, así como de inyectar fondos a la pequeña y mediana empresa a las que considera los verdaderos motores de la economía provincial y las que más están sufriendo la situación actual.
El exministro expresó su esperanza de que la medida de estado de emergencia sea transitoria y que los fondos asignados se inviertan de manera directa en dos componentes: servicios esenciales y apoyo a los sectores de la economía más golpeados, refiriéndose de nuevo a los pequeños y medianos empresarios.
"Espero que estos fondos no sean istrados para seguir en esta forma de a veces no solucionar el problema de fondo y volverse una piñata", manifestó Carles en tono de preocupación. "Espero que estos fondos no sean istrados para seguir en esta forma de a veces no solucionar el problema de fondo y volverse una piñata", manifestó Carles en tono de preocupación.
Naturaleza de las manifestaciones
El exministro señaló que no se están viendo marchas masivas ni cierres con gran cantidad de personas (cientos o miles) refiriéndose a la relación histórica entre la empresa y el sindicato Sitraibana, que data de hace más de 60 años, describiéndola con "muy buenas relaciones", donde supieron negociar convenciones colectivas y superar inconvenientes.
El principal reclamo de este sindicato, según Carles, era el restablecimiento de la Ley 45 de 2017, un reclamo, que involucraba la conexión de la norma 45 con una Ley 51 ya inexistente. No obstante, el exministro señaló que el Secretario General del sindicato, descrito como experimentado negociador, pareció dar un paso en retroceso tras la aprobación del gabinete, exigiendo que la norma fuera a la Asamblea en su lugar.
Agentes que podrían involucrarse
Carles expresó su inquietud con la posible intervención de "otros agentes" en el conflicto que puedan estar "calentando" a los dirigentes y al mismo tiempo hizo un paralelismo con el proyecto minero en Coclé, donde la intervención de otros agentes resultó en la pérdida de 54 mil empleos tras el cierre de la mina.
El exministro sugirió la posibilidad de que haya algún interés político detrás de la no puesta en marcha de un acuerdo, buscando "seguir propiciando el caos" o la incertidumbre en Changuinola.
En definitiva, Carles advirtió estar en contra de crear una cooperativa similar al caso de Puerto Armuelles (Barú) con Coosemupar, que fracasó en la istración de la producción y donde se involucraron políticos, enfatizando la necesidad de decir las cosas "de manera firme, de manera valiente" y apostar por un diálogo donde participen todos los actores relevantes.
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Luis Ernesto Carles: "En Bocas del Toro están en juego más de 30 mil empleos"