Los comerciantes de aproximadamente 30 locales ubicados en la vía que conduce a Vacamonte, en el distrito de Arraiján, se rehúsan a desalojar sus puestos de trabajo, donde han permanecido desde hace más de 10 años. Mientras tanto, los residentes de la barriada Las Perlas piden que abandonen el lugar debido a que están instalados en una servidumbre pública.
Los propietarios de los locales sostiene que están al día con los pagos de impuestos y los permisos de operación.
Por su parte, los moradores indican que la falta de agua en la comunidades se origina a causa de las conexiones de tuberías de estos comercios y que, además, se ven afectados por los vehículos que se estacionan en la vía que conduce al residencial para realizar compras.