Autoridades de migración de la Unión Europea ofrecieron el miércoles aliviar las normas de asilo para Polonia, Lituania y Letonia, en respuesta a lo que la UE califica de un “ataque híbrido” por parte de Bielorrusia para desestabilizar al bloque utilizando a los migrantes.
Aproximadamente 8.000 personas, muchos de Irak, han cruzado a los tres países de la Unión Europea desde el inicio del año. El presidente bielorruso Alexander Lukashenko está acusado de atraerlos a su país con la promesa de ayudarlos a entrar a Europa en venganza por las sanciones que la UE impuso contra su gobierno y empresas.
Durante seis meses, Polonia, Lituania y Letonia podrán ampliar el periodo para registrar solicitudes de asilo de tres a 10 días hasta cuatro semanas. Las solicitudes sólo se aceptarán en puntos de cruce fronterizo específicos.
El proceso podrá hacerse en las fronteras, incluso cualquier derecho de apelación, pero debe concluir en 16 semanas. Los tres países también podrán aplicar procesos nacionales expeditos para deportar a personas cuyas solicitudes han sido rechazadas. Las personas podrán ser detenidas en centros de recepción temporales.
Las propuestas para aliviar las normas presentadas por la rama ejecutiva de la UE, la Comisión Europea, deben ser aprobadas por los 27 países antes de entrar en vigor.
La comisaria de Asuntos del Interior, Ylva Johansson, dijo que la cantidad de migrantes que llegan a Minsk, la capital de Bielorrusia, ha disminuido y que muchos son regresados a sus países de origen.
“El influjo de nuevos migrantes instrumentalizados a Minsk, más o menos se ha detenido por completo”, dijo a la prensa en Bruselas. Johansson minimizó las preocupaciones de que representa una crisis. “Los números no son elevados. Esta no es principalmente una crisis migratoria. Es una amenaza híbrida”.
FUENTE: Associated Press