El derechista Friedrich Merz, un rival histórico en la familia conservadora alemana de la canciller Angela Merkel, luchará por tercera vez por presidir la Unión Cristianodemócrata (CDU), el partido que busca renovarse tras su derrota en las elecciones generales de septiembre.
Representante del ala más derechista del partido y con fuertes vínculos al ámbito empresarial, Merz ya optó a la presidencia en 2018 y en 2020, pero fue derrotado por los centristas Annegret Kramp Karrenbauer, primero, y Armin Laschet, después.
El plazo para la presentación de las candidaturas a dirigir la CDU se cerrará el próximo miércoles, tras lo cual tendrán un periodo de dos semanas para presentarse a las bases del partido.
Por primera vez en su historia, la CDU someterá a una consulta entre sus 405.000 militantes la elección de la presidencia, lo que hasta ahora correspondía al congreso del partido. El ganador deberá ser ratificado entre el 21 y el 22 enero por el congreso federal.
Röttgen, experto en política exterior de la CDU, fue el primero en presentar su candidatura la semana pasada. Braun, ministro de la Cancillería y persona de máxima confianza de Merkel, presentó la suya poco después.
El primero había optado ya a la presidencia del partido en 2020, pero no pasó de la primera vuelta y quedó apeado de la pugna por Merz y Laschet, quien fue finalmente elegido para el puesto.
Su propone ahora presentarse de nuevo como figura integradora, que cierre la división entre centristas y derechistas.
Röttgen fue entre 2009 y 2012 ministro de Medio Ambiente de Merkel, quien le cesó tras ser derrotado en Renania del Norte-Westfalia. Preside desde 2014 la comisión de Exteriores del Bundestag (Parlamento) y defiende la lealtad al eje transatlántico y otras líneas maestras de la política exterior alemana.
El ministro de la Cancillería Braun forma parte del círculo más cercano a Merkel y, desde su posición en el gobierno saliente, coordinó la lucha contra la pandemia. Se mantuvo siempre a la sombra la canciller y será su primera candidatura a la presidencia del partido.
La pugna por la jefatura del partido se reabrió tras asumir Laschet la responsabilidad de la derrota sufrida en las elecciones generales del pasado septiembre y anunciar su retirada.
El relevo al frente de la CDU es el tercer intento de dar un liderazgo fuerte al partido, que Merkel lideró entre 2000 y 2018. Ese año la líder anunció su retirada del poder tras varias derrotas a escala regional.
La primera elección correspondió a Kramp-Karrenbauer, considerada la sucesora ideal para Merkel, pero que tiró la toalla en 2019 cuestionada en su liderazgo. A principios de este año Laschet se impuso como nuevo jefe del partido y candidato del bloque conservador en las generales de septiembre.
La CDU y su hermanada Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) se hundieron en esos comicios en un 24,1 %, frente al 25,7 % del Partido Socialdemócrata (SPD) de Olaf Scholz. Fue el peor resultado para el bloque conservador en unos comicios nacionales.
FUENTE: EFE