En días pasados se llevó a cabo la primera edición del Comic Con de Panamá, la convención de cultura popular que prometía ser la más grande en la historia de nuestro país. Tuve la oportunidad de asistir los 3 días y ahora les comentaré un poquito de mi experiencia. 683c2u
Lo bueno:
La participación de los invitados internacionales, Jason David Frank y Manu Bennett fue uno de los puntos más positivos de la convención, estuvieron los 3 días saludando a los fans, tomándose fotos (incluso fuera de los photo-ops) y respondiendo preguntas en los Q&A.
Las experiencias me parecieron interesantes, El trono de hierro, el Bat-pod y el Bati-movil estaban bien logrados.
Lo Malo:
Lo recibido por el costo de la entrada no era equivalente. En lo personal, adquirí la entrada de 3 días y fue decepcionante no recibir ningún tipo de beneficio adicional, aparte del "pequeño descuento", el cual es esperado. Otras convenciones de este tipo entregan camisetas, comics y otros productos, lo cual realza la experiencia.
El main stage permaneció muerto durante casi toda la convención, sólo se activó en los momentos finales de la misma y esto fue un desperdicio. En Panamá contamos con excelentes bandas de covers de Anime y videojuegos, cómo Enkai, Anime Concerts y GLITCH, que pudieron dar un excelente toque al evento y hacerlo menos monótono.
Lo feo:
El Centro de Convenciones Amador (Figali), que en lugar de centro de convenciones parece una gran galera, me parece el lugar menos recomendable para este tipo de eventos. El estado deteriorado del piso y lo deplorable de los baños, hicieron que mi experiencia fuera en caída. Y ni mencionar los diminutos cuartos en los que se realizaban los es, en el Centro de Convenciones Atlapa esto hubiera sido mucho mejor.
Antes de cerrar, quiero hacer notar que esto lo hago con el fin de que si hay una Comic Con el próximo año, tomen en cuenta la opinión de los fans y refuercen los puntos débiles del mismo, esto es una crítica constructiva.
Y a ti ¿qué te pareció el evento?, cuéntame tu opinión en los comentarios.
FUENTE: Fernando Pimentel