Este fin de semana Jane Fonda revolucionó a todos sus seguidores de Instagram al publicar un vídeo grabado a través de la popular app TikTok en el que aparecía tumbada en una esterilla de yoga y enfundada en un ajustado atuendo.
En un primer momento, parecía que la actriz se había animado a retomar los legendarios vídeos de aerobic que grabó en la década de los 80 y que han ganado una nueva popularidad en las últimas semanas, durante el período de aislamiento en el que miles de personas están recurriendo a los servicios de streaming para mantenerse en forma entrenando desde casa.
Salta a la vista que la intérprete de 82 años sigue en plena forma, tanto por la esbelta silueta que luce, y que quedaba acentuada por las mallas y el body que se enfundó para la ocasión, como por la soltura con que realiza sus ejercicios de piernas.
Sin embargo, la protagonista de la serie 'Grace and Frankie' no está por la labor de reabrir esa etapa de su carrera y, en realidad, la publicación era un cebo para conseguir centrar la atención hacia el movimiento 'Fire Drill Fridays' que continúa apoyando durante la cuarentena a través de las redes sociales.
"Sabéis qué, ya hay muchas rutinas de ejercicios ahí fuera en estos momentos, en la televisión y en los ordenadores", afirma en la grabación tras realizar varias elevaciones de piernas. "Lo que me gustaría de verdad que hicierais es trabajar conmigo por el planeta. Estamos en medio de una crisis climática, de una verdadera emergencia", ha pedido a todos sus fans, "el futuro os necesita, yo os necesito".
Esta iniciativa, que Jane lleva apoyando varios meses en colaboración con Greenpeace, había venido reuniendo a científicos, expertos, celebridades y ciudadanos anónimos cada viernes en Washington D.C. para reclamar la implementación de medidas contra el cambio climático a través de la desobediencia civil no-violenta.