El presidente de Corea de Sur, Moon Jae-in, tendió la mano el jueves a Japón para solventar su guerra comercial y señaló que si Tokio quiere dialogar, Seúl se “unirá con mucho gusto”. 4w5d2q
"Si un país convierte en un arma un sector en el que tiene una ventaja comparativa, inevitablemente, el orden del libre comercio pacífico se ve afectado. Un país que consiguió crecer primero no debe tirar la escalera mientras otros están siguiendo sus pasos”, declaró Moon en referencia a Japón.
El discurso de Moon durante un acto para conmemorar el 74to aniversario de la liberación de Corea del control japonés al final de la Segunda Guerra Mundial, se produjo en un momento de gran enojo y crisis diplomática por las últimas medidas de Tokio para imponer restricciones comerciales a Seúl.
Corea del Sur acusó a Japón de emplear el comercio para atacar a su economía, que depende de las exportaciones, y vengarse de Seúl por los fallos judiciales que decretaron que las empresas niponas deben indemnizar el trabajo forzoso de los surcoreanos durante la IIGM. Las iniciativas de Tokio hirieron susceptibilidades en un país en el que muchos siguen resentidos por el despiadado gobierno colonial japonés de 1910 a 1945.
Las disputas comerciales coinciden con el empeoramiento de las relaciones entre las dos Coreas. Pyongyang ha estado ignorando los llamados de Seúl para dialogar y en las últimas semanas probó nuevos proyectiles de corto alcance que podrían suponer una amenaza para su vecino del sur.
FUENTE: AP